domingo, 5 de agosto de 2018

LA TRANSFORMACIÓN INTERIOR A TRAVÉS DEL TAI CHI CHUAN



INTRODUCCIÓN

La práctica de cualquier disciplina normalmente produce en el ser humano un bienestar. Con frecuencia este sentirse mejor no transforma nuestra forma de ver la vida y mucho menos de afrontarla, disfrutarla y reverenciarla.

Con la práctica de cualquier deporte se queman calorías, se aumenta la adrenalina y finalmente relaja y beneficia.

Lo que voy a exponer no tiene nada que ver con eso. La práctica de los deportes va añadiendo cualidades, capacidades con las que enriquece la personalidad. Normalmente definen y perfilan.

Pero cuando el entrenamiento de una disciplina llega a realizar la magia de hacer vibrar los hilos más internos del ser, no actúa como un añadido más a la personalidad.

El entrenamiento continuado del Tai Chi Chuan me ha transformado completamente como persona.  No es un elemento más de mi vida, sino que me ha magnetizado por completo y ha rehecho todas las formas bajo las cuales se puede posar mi conciencia.

Cuando se apresa los principios que animan al Tai Chi Chuan, no ya con la mente o el corazón, sino más allá, con el espíritu, con el alma, con el silencio y la intuición, entonces se transforma en un potente elemento catalizador que produce una alquimia total en la personalidad.

Cuando actúa así, ya no añade nada nuevo, simplemente produce un cambio total, de alguna manera se puede afirmar que vuelves a nacer, comienzas a “ver” el mundo, y a ti, como parte integrante de él, antes sólo lo pensabas, ahora contactas con él.

Ya no realizas Tai Chi, el Tai Chi te realiza. No haces Tai Chi, el Tai Chi te construye desde dentro hacia fuera. Tú eres la semilla, tu desenvolvimiento armónico lo hace realidad los principios del Tai Chi.

A través de estas líneas iré trazando la senda que me transformó poco a poco y me sigue transformando. Si alguna vez dejara de cambiar, comenzaría la morir, porque la Vida es transformación y cambio, por lo que si renunciamos a estos principios estaremos renunciando a la Vida.

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